miércoles, 3 de octubre de 2007

En la cima del Circo (3813m)

Ayer llegue a la cima. El viento azotaba una blanca pradera y el aire era aún mas invisible. La distancia era desoladora, la soledad, infinita.
Tan pequeño, ínfimo entre gigantes que reposan. La cima me mostro un blanco océano. La cima es mas que un lugar. Es una experiencia mística, única, con su propio estilo.
He estado en las profundidades y ahora en la cima, donde la vida desaparece, y el universo se acerca. Donde el silencio es un trueno y las estrellas estan a mi alcance.

La cima, donde casi alcance su mano.




Rumbo al Bowl de Highlands. Una de las experiencias más místicas que he vivido.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo también he estado en las profundidades, mi querido amigo.

Creo que sabes bien que incluso aún lo estoy y cuánto me cuesta salir.
Quisiera, tal como dice la canción de U2, correr, esconderme... ir a un lugar "donde las calles no tienen nombre"....
No pierdo la esperanza de llegar a estar en un lugar así, claro que ya no tengo a quien decirle lo que sigue en esa canción: "cuando vaya allí, iré contigo...".

Pero también creo que sabes claramente todo lo que me reconforta el volver a encontrarnos y compartir nuevamente como en épocas que -al menos para mí- eran mejores. :)

Me conoces, y sabes que a pesar de ser el que más se cae... de alguna extraña manera mi frase es siempre "Walk on".

¡Un abrazo!

Morgana dijo...

recuerdo haber buscado entre paginas virtuales tus escritos para conocerte mejor...recuerdo haber leido esta experiencia. solo que ahora...hay recuerdos mutuos en mi memoria.
kiz :#